Hermano sol, hermana luna

"Señor, haz de mí un instrumento de tu paz:

donde haya odio, ponga yo amor,

donde haya ofensa, ponga yo perdón,

donde haya discordia, ponga yo unión,

donde haya error, ponga yo verdad,

donde haya duda, ponga yo fe,

donde haya desesperación, ponga yo esperanza,

donde haya tinieblas, ponga yo luz,

donde haya tristeza, ponga yo alegría..."

Francesco Giovanni Bernardone

(Francisco de Asís)

1182-1226

Procedente de una rica familia de comerciantes burgueses, tras su conversión, con 23 años, Francesco decidió dejarlo todo, ante la oposición violenta de su padre, para vivir en la más extrema probreza ayudando a los necesitados, especialmente los enfermos. Hoy es conocido como "el santo ecologista", por su respeto y profundo amor hacia todos los seres vivos, en los que veía la impronta del Creador, amor que se extendía a los astros o los elementos, incluídos el fuego y el agua, a los que también llamaba "hermanos". Francisco es venerado por los cristianos católicos y respetado por muchos creyentes de otras religiones que ven en él un ejemplo perfecto de humildad, servicio al prójimo y lealtad al mensaje de paz y amor de Jesús.

Cuentan que el poderoso Papa Inocencio III, quedó tan impresionado por la humildad y sencillez de Francesco, que se arrodilló ante sus pies descalzos cuando éste fue a pedirle que aprobara su Regla. Pero esto no pasa de ser una leyenda, quizás...

Imagen: Graham Faulkner, como Francisco de Asís, en "Hermano Sol, hermana Luna" de Franco Zeffirelli, 1972.